SER O NO SER...

¿La libertad de elegir?

Todos tenemos la libertad de elegir lo que queremos ser buenos, malos, tolerantes, intolerantes, falsos, sinvergüenzas u honestos.

Pero se nos olvida algo muy importante que de lo que decidamos ser, dependerá nuestro destino, nosotros lo labramos con nuestras decisiones a diario, algunas veces nos equivocamos, si, pero tenemos la opción de corregir y volver a empezar.

He conocido a muchas personas que se equivocan a diario con sus decisiones, porque han decidido ser falsas, ser malas e intolerantes incluso con los que les rodea y lo peor creen vivir en lo correcto, ¿Por qué?, no lo se, quizá a sí lo aprendieron en sus hogares, en la escuela o en alguna secta a donde cada semana acuden a darse golpes de pecho para liberar un poco su conciencia y seguir cometiendo atrocidades, son como los falsos mecías o los fariseos, con una mano te dan la bendición y con la otra te apuñalan.

Realmente no se dan cuenta que con sus acciones se ridiculizan, desnudan su estupidez, de tanto que creen conocer terminan por desconocerlo todo, pero así es nuestra sociedad en la actualidad y lo único que podemos hacer para salvarnos de ellos es ignorarlos, aparte de reírnos.

También conocemos personas bien nacidas que con su humildad no tienen que hacer ningún tipo de faramallas, no caen en provocaciones, son en realidad para mi personas inteligentes que tienen la capacidad de decidir por el bien de ellos y la humanidad en su totalidad, o sea no se fijan en condiciones de poder o humildad, solo piensan en hacer el bien sin fijarse a quien siguiendo el evangelio del Señor y punto.